miércoles, 13 de junio de 2018

15. Portomarín o Cada uno como quiera


Me lo dijo un compañero de Camino mejicano al que conocí en las primeras etapas: “Cada uno hace el Camino como quiere, y todos los caminos están bien”. Él había salido solo en Saint Jean Pied de Port y, la última vez que lo vi, formaba parte de un grupo de doce personas de edades muy distintas y distintas nacionalidades que se desplazaban, cada cual a su ritmo, de albergue en albergue, sin ninguna previsión anterior.

He conocido aquí a quien proyecta hacer el Camino completo por tramos en cinco años, a quien lo hace por tercera vez y seguirá haciéndolo, a quien va solo y a quien va acompañado, a quien lo hace en bicicleta y a quien lo hace andando o a caballo, a quien va con mochila y a quien la mochila se la lleva Correos o alguna otra empresa que ofrece ese servicio, a quien duerme en habitaciones compartidas y a quien no comparte nunca la habitación, a quien lo hace desde Centroeuropa y lleva tres meses andando y a quien lo hace desde Sarria y tarda cinco días, a quien lo hace por motivos espirituales y a quien simplemente es un excursionista y, en fin, a quien hace el de ida y a quien hace el de ida y el de vuelta.

Y todos están bien. El Camino es personal y no hay camino más importante que el propio. Uno se da cuenta de eso a partir de Sarria, cuando ve la ilusión con que inician el Camino numerosos grupos de familiares y amigos, casi todos españoles. En Sarria, la peregrinación adquiere tintes más populares, incluso festivos. A partir de ahí, las etapas están más perfiladas y los peregrinos se concentran en los mismos pueblos, en los que forman grupos que charlan en las terrazas de los bares y los restaurantes.

Portomarín, por ejemplo, es un pueblo pequeño con multitud de establecimientos dedicados al Camino, en el que es raro ver por la calle a alguien que no lo está haciendo. Aquí, el Camino recuerda al descanso de una romería y se parece poco al de los pueblos medio abandonados de Castilla.

El Camino es personal y todos los caminos son igualmente importantes, me he dicho mientras daba una vuelta por Portomarín, donde me he sentido ajeno al ambiente, solo y extraño.


* Ruta.